20.3.06

10.3.06

Estoy enferma y sola.
Sin vicios, sin hambre, sin ganas.
Me han abandonado mis fuerzas, mi talento, mi entusiasmo por vivir.
Extraño épocas pasadas, en donde estaba yo. Ahora sólo está mi reflejo,
mi silueta, una parte de mí que no soy yo, o que soy pero no me representa
con dignidad.
Dónde quedó la cerveza tibia, el humo de cigarrillo, la sangre de mis manos?
Dónde están las miradas intuitivas, la ceguera implacable, las noches en que me comía la cabeza pensando, meditando, leyendo?

No sé lo que digo, no puedo pensar sin nicotina en la sangre, sin alcohol y con tan poca cafeína... cómo hay gente que vive así? No lo entiendo, mi crebro se siente entumido, mi garganta afónica, mi trasero adolorido... no entiendo, no entiendo lo que pasa por mi mente.
Estoy enferma, y esa es mi excusa para escribir mediocremente, no me abandones por eso.

Ven y recuéstate a mi lado, dame esperanza de vida o de muerte, no me dejes en el limbo. Ven y tómame de la mano, pon tu cabeza entre mis piernas y calienta mi ragazo. Ven, haz que me pierda en el licor de tus palabras, exhalame en un suspiro el humo de tus deseo y déjame beber la cafeína de tus tiernos lamentos.

Te espero.